Así lo dijo el rector de la UNL en referencia a la esperada vuelta a una rutina fuera de la cuarentena. También habló sobre las actividades de la casa de estudios en más de un mes de la emergencia.
La Universidad Nacional del Litoral fue una de las primeras instituciones en ponerse a tono con las modificaciones que planteó la pandemia en la sociedad, incluso antes de que se dictara la cuarentena a nivel nacional.
“Hace más de un mes que estamos trabajando en esta emergencia, primero fue un Comité de Emergencia Universitario, en el que se tomaron medidas para proteger a nuestros estudiantes, docentes y no docentes y a partir de allí trabajar fuertemente y que este tiempo que no estuvimos en las aulas se pueda recuperar a través de utilizar la tecnología para dictar clases, sino también poner a disposición todas las capacidades científicas y tecnológicas que tiene la universidad, para que los gobiernos puedan contar con eso”, dijo el rector de la UNL, Enrique Mammarella, en una nota vía Skype con el programa televisivo Apto para Todo Público.
“A través de la red de universidades las iniciativas se extienden a todo el territorio nacional, es decir se ponen en contacto las capacidades que tienen las universidades nacionales con cada uno de los gobiernos locales”, graficó.
También mencionó que “una de las actividades más importantes que se llevan adelante es la capacitación de todo el personal de emergencia que trabaja en la pandemia, nosotros tenemos a través de la Facultad de Ciencias Médicas la formación en emergentología, pero esta situación es diferente”.
Fundamentó esa afirmación en que “nuestros sistemas de emergencia generalmente van a buscar a personas que tuvieron accidentes viales, algún otro siniestro o un ataque cardíaco, pero no a alguien que tuvo una contaminación con un virus y que puede contagiar al personal y que por lo tanto hay que cuidarlo diferente”.
Detalló que “la capacitación alcanza a médicos, choferes, anestesistas, y todos los que asisten al evento, hace varios días que se viene trabajando con el Cobem, el 107, el sistema de anestesiología del Hospital de Niños, para colaborar en formación, vestimenta, en la desinfección de lugares, hay que preservar al personal de salud para poder salir adelante”.
Consultado sobre el voluntariado en la UNL, Mammarella dijo que “tenemos una convocatoria permanente, hay un voluntariado interno que está colaborando en la universidad y de hecho algunos chicos están colaborando con la planta de alimentos”.
Describió también que “hay muchos de nuestros chicos que no pudieron volver a sus lugares y se quedaron en Santa Fe, como también otros que estamos tratando de repatriarlos”.
En cuanto a la articulación con el Estado para poner a disposición parte de las estructuras de la UNL, Mammarella indicó que fue fruto de una conversación con Jorge Hoffmann de ATE y en los Comité en los que participó.
Del mismo modo, el rector de la UNL ponderó el trabajo de las universidades del país en general.
Una de las hipótesis de trabajo que destacó fue “la forma en que la población gana inmunidad frente al Coronavirus y no solamente la recuperación”.
Mammarella consideró que “la vuelta a la normalidad depende fundamentalmente de que no saturemos nuestro sistema de salud, que depende de la capacidad de camas, respiradores, pero también de médicos, enfermeros, personal capacitado y la capacidad de traslado, esto no es igual en todas las ciudades”.
Consultado acerca del próximo llamado a exámenes para mayo, el rector dijo que “estamos esperando lo que dirá el presidente el próximo 26 sobre las medidas de aislamiento, desde el momento en que podamos volver a las aulas habrá un período administrativo y luego el llamado a exámenes, si el presidente prolonga el aislamiento iremos pasando fechas”.
Por último, dijo: “pensemos que del alumnado de la UNL, sólo el 30% es del gran Santa Fe, el resto viene de otros lugares y algunos de ellos tienen fronteras cerradas, entonces no se puede hablar rápidamente de una normalidad y para todos”.