Ese es el título de un proyecto aprobado en la última sesión del concejo muncipal y que tiende a incluir a las personas con trastornos del espectro autista.
El concejo municipal transformó en proyecto de resolución uno de ordenanza y aprobó una iniciativa que pretende lograr una cuota más de inclusión.
Se trata de un texto impulsado por la concejala de Cambiemos, Luciana Ceresola que se denomina “Compremos Tranquilos”.
El proyecto tiene como finalidad que los supermercados y establecimientos comerciales, establezcan una hora semanal donde se adecuarán a los niveles sonoros y lumínicos de sus locales, a los fines de generar un lugar favorable para las personas que padecen Trastornos del Espectro Autista.
“Lo que estamos solicitando no genera ninguna pérdida comercial y genera ganancias en la calidad del trabajo de quienes se desempeñan en esos lugares”, dijo Luciana Ceresola.
Además, indicó que esta iniciativa se lleva adelante en Londres, ciudad donde nació la propuesta por parte de una firma de supermercados.